Caminando juntos
Las huellas del Padre El grupo camina por la playa solitaria al atardecer. El mar está, como siempre, encrespado. La arena vuela y pica las piernas. No les importa. Van todos en malla, muy atentos, mirando el piso. Recorren la costa, hacia el lado del faro, formando una hilera humana que rastrilla la arena. Los dirige un hombre al que flanquean siete niños de diversas edades. Por momentos alguno de los chicos se detiene, recoge algo del suelo, lo observa, se lo entrega al hombre y pregunta con ansiedad: -¿Fósil es, papá? -¿Fósil es?, repite. El hombre frena su marcha, clava la mirada un segundo sobre el objeto y dicta el inapelable veredicto: -No. Es solo una piedra. Y agrega con cierta pena: Fijate que es pesada y que no tiene la superficie rugosa ni un espesor acanalado como los fósiles. Devuelve la piedra a la criatura quién la suelta contrariada y retoma de inmediato la tarea. A lo largo de la tarde el episodio se va repitiendo, pero algun...