Buenas Prácticas para Mayores de 70 años. Nuevo libro

Cómo disfrutar y prolongar la tercera edad.

Este nuevo libro, dedicado a los mayores de 70 años pero de utilidad a partir de los 60 años, actualiza el libro anterior titulado "Buenas Prácticas para una Generación A", incorporando nuevas investigaciones, vivencias y experiencias personales habidas durante una década.

UNA NUEVA ETAPA DE VIDA.

 

¡Una nueva etapa ha aparecido en la vida humana!

Es la que transitan las personas de 60, de 70, de 80 años y aún de mayor edad, que llegan a esas edades con un estado físico y mental que les da la oportunidad de seguir viviendo muchos años más con calidad de vida y plenitud como consecuencia de los progresos en el mundo de la salud y de la tecnología.

No son jóvenes ni de mediana edad, son mayores que pertenecen a la “tercera edad” y les falta mucho para que ingresen a la “cuarta edad”, la edad de la vejez. Además, son millones no solo en el mundo sino también en nuestro país.

Sin embargo, nuestra sociedad todavía tiende a considerarlas como personas “viejas”  y las discrimina impidiéndoles participar activamente en la vida social y censurando sus conductas cuando no se ajustan a las pautas sociales propias de la ancianidad.

Al mismo tiempo, en lo personal, muchas de estas personas sufren una crisis de identidad motivada por el deterioro del cuerpo, la menor energía, el fin de la vida laboral, el nido vacío, la consecuente pérdida de los vínculos sociales, la muerte de amigos, familiares, la pérdida de poder personal etc.,

¿Y cómo son sus reacciones?

Muy diversas.

Algunos ya se consideran viejos y empiezan a sentirse y a actuar como tales. Dejan de salir, de conocer nueva gente o de emprender nuevas actividades o proyectos. Se auto discriminan y se privan de muchas cosas que todavía podían hacer. Dejan de cantar, de bailar y empiezan a hablar todo el tiempo de las enfermedades, achaques y dolencias. Inician un camino gradual de desinterés y de retiro de las cosas. Ya no les interesa el mundo de hoy y piensan que todo tiempo pasado fue mejor. Tratan de comer bien, de estar cómodos y, si pueden, de viajar de vez en cuando, pero se refugian en su entorno inmediato, lo que a veces termina por dejarlos en casa en pijama o camisón, aburridos, viendo televisión.

Otros, en cambio, no quieren envejecer. Se muestran obsesionados por verse jóvenes, no celebran los cumpleaños ni quieren ser llamado/as abuelo/as, hacen ejercicio de manera excesiva y se someten a cirugías para ocultar la edad que tienen. Si pueden, siguen corriendo todo el día de aquí para allá, trabajando igual o más que antes, sin pensar en que están en otra etapa vital.

Finalmente, otro grupo, que es el más numeroso, no tiene bien claro qué hacer o cómo sentirse en esta etapa de la vida. Por momentos se ubica en la primera posición y por momentos en la segunda.

Todas estas situaciones me preocupan porque, en primer lugar, implican negar la especificidad de la nueva etapa, que nuestros padres no conocieron y fue creada por el aumento de la longevidad, etapa que no es la de la primera adultez pero tampoco es la edad de la vejez.

En segundo término, y lo que es más importante, me preocupan porque se desaprovechan las oportunidades de esta nueva etapa de la vida humana, como son las siguientes:

• ·         Mejorar como seres humanos
• ·         Recuperar y acrecentar los lazos familiares, afectivos y sociales
• ·         Encontrar nuevos intereses y objetivos de vida
• ·         Cuidar adecuadamente el cuerpo y la salud
• ·         Disfrutar el presente y vivir integrados al mundo de hoy.
• ·         Planificar el propio futuro.

Ello me motivó a investigar y a escribir dos breves ensayos, el primero hace varios años y el segundo hace poco, dedicado a mis amigos.

Hoy, como fruto de mayores investigaciones y experiencias publico este libro, dedicado a los hombres y mujeres que ya han cumplido los sesenta años, en el que sostengo que es necesario ser conscientes e “instalarse” en esta nueva etapa, trabajando y aprovechando las oportunidades que brinda para lograr una vida “merecedora de ser vivida con plenitud”.

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BUENAS PRACTICAS PARA MAYORES.

Sin ningún ánimo de originalidad, y como mera recopilación de ideas y reglas existentes, con los contenidos y desarrollos expuestos a continuación, se proponen aquí las siguientes Buenas prácticas para mayores de 60, 70, 80 o más años:

 

1.  AUTONOCIMIENTO. Hacer un balance vital. Saber qué te motiva, qué te frena y a qué le tenés miedo.

2.  AGRADECIMIENTO. Ser agradecido con la vida: Apreciar la mitad llena del vaso. Reinterpretar lo malo del pasado.

3.  BUEN HUMOR Y POSITIVIDAD. Practicar el buen humor y ser positivo: Evitar las quejas y enfrentar las dificultades desde lo positivo.

4.  PERDON. Perdonar y pedir perdón: Liberarnos del peso de los agravios recibidos o que otros nos atribuyen.

5.  OCIO Y ESPIRITUALIDAD: Emprender actividades que tengan un sentido gozoso o trascendente en sí mismas.

6.  GENEROSIDAD Y SOLIDARIDAD: Ayudar a los que tenemos cerca y colaborar por un mundo mejor.

7.  CUIDAR LA SALUD: Controles médicos, tratamientos, alimentos sanos y prácticas antioxidantes.

8. MANTENER ACTIVO EL CUERPO: Practicar actividades físicas y mantener la vida sexual.

9.  SANAR Y ESTRECHAR RELACIONES FAMILIARES: Reconciliarnos con quienes estamos distanciados y estrechar nuestros afectos. 

10. AMISTADES. Construir un espacio para los amigos: Vencer la soledad con amistades viejas y nuevas.

11. ACTIVIDADES. Quitar al trabajo del centro de nuestra existencia y empezar a dar lugar a otras actividades. 

12. APROPIARSE DEL MUNDO DE HOY: Vivir el tiempo presente como propio y aprovechar el mundo digital.

13. VIVIR EL PRESENTE: Aprovechar cada día como si fuera único.

14. PROYECTOS PERMANENTES. Estar preparando cosas para hacer en los próximos meses y años.

15. PLANIFICAR EL FUTURO: Organizar una cuarta edad segura en lo espiritual y material.

Libro: “BUENAS PRÁCTICAS PARA MAYORES DE 70 AÑOS. CÓMO DISFRUTAR Y PROLONGAR LA TERCERA EDAD” de Eduardo M. Favier Dubois, Ed. Ad Hoc, Bs.As. 2022. 

Podes descargar el texto completo haciendo click en el siguiente link:

Buenas prácticas para mayores de 70 años